Por Guillermo Contreras
MARA ACOSTA 27 años, mujer de barrio, humilde en su condición socio económica, con todas las penurias que estos tiempos traen aparejadas, pero sin duda con un corazón enorme y voluntad de hierro, vive con su esposo que trabaja de albañil y tiene dos hijos muy pequeños que atiende muy bien, cobra asignación por cada uno de ellos, trabajaba en un geriátrico pero lo dejo por sus niños y su otra pasión, atender en su vivienda un merendero desde hace un año, a veces disfrazada de payaso, al cual asisten 35 niños desde 1 año de edad hasta los 15 años de edad del extenso barrio en el que vive y seguramente algún otro barrio vecino, también les da clases de apoyo sin ser maestra, es muy poca la ayuda que recibe del estado, pone de su bolsillo y recibe donaciones a diario para atender a los niños que asisten los días lunes, miércoles y viernes a partir de las 18 horas, necesita de todo, harina, azúcar, leche, un horno, garrafa, mesas o tablones, sillas, chapas para poder agrandar y cerrar el humilde techo de 3 por 3 que tiene y que le sirve de reparo a los niños. Su merendero PANCITAS LLENAS funciona en la calle Américo Aguilera 1340 barrio Parque del Virrey de la ciudad de Alta Gracia.